Por Yamiri
Rodríguez Madrid
La herbolaria es
uno de los legados más ricos e importantes que nos dejaron los pueblos
originarios y que aún subsisten, aunque con dificultades; de ahí que sea digno
de reconocer el esfuerzo que está poniendo la Secretaría de Salud (SSA) en
rescatar la medicina tradicional en el estado de Veracruz.
Hace algunos
años, en la sede de la dependencia, ahí junto al Cerro del Macuiltepetl, se
había destinado un espacio para crear un jardín de herbolaria, con capacitación
continua a fin de que más personas aprendieran sobre su uso, pero como muchas
otras cosas, se perdió.
Esta nueva
administración estatal decidió rescatar esta antigua práctica con talleres en
los municipios. En Álamo Temapache, al
norte de la entidad, se instaló un jardín educativo y, hasta este viernes, se efectúa
una jornada denominada “La medicina y la partería tradicional indígena” en
Coatzacoalcos.
Difícilmente un
joven en una ciudad sabe para qué sirven los chiqueadores o ha tomado una purga
echa por la abuela. Hoy los tés, las
infusiones, se toman en establecimientos de lujo, como símbolo de estatus;
entre más exótica es la mezcla, más cara es la taza de té, que puede alcanzar
los 70 pesos, cuando antes se daba manzanilla o hierbabuena para el dolor de
estómago, de hierbas amargas para recoger la bilis, de tila para los
nervios.
En los jardines,
ya ni en las macetas, hay sembrada ruda, epazote, ni ninguna de estas plantas
que tienen un fin en la medicina, de ahí que sea justo y necesario que se
difundan las bondades de la herbolaria. Que lo haga la propia Secretaría de
Salud tiene mucho más valor.
Se trata no solo
del rescate de la sabiduría ancestral, de que conozcan de herbolaria las nuevas
generaciones, sino también de reconocer, proteger y promover los derechos de
nuestros pueblos originarios. Esperemos que esta vez sí prospere.
@YamiriRodriguez
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