Por Yamiri Rodríguez Madrid
No tan lejos de
la capital veracruzana, Tonayan, un pequeño municipio veracruzano, apenas y
tiene 18 millones de pesos como presupuesto para este 2019.
Poco se puede
hacer con tal monto y tantas necesidades; de ahí se entiende que tenga varios
rubros en cero como los de Salud, Drenaje, Prevención Presupuestaria,
Auditoría, el Programa de Desarrollo Institucional Municipal, Estímulos a la
Educación, Bienes Muebles, Gastos Indirectos, Acciones Sociales Básicas,
Planeación Municipal, Educación, Bienes Inmuebles, Deuda Pública,
Fortalecimiento Municipal, Protección y Preservación Ecológica.
Así, con los
pocos pesos que tiene, el 43.7 por ciento es para Urbanización; 23.5 por ciento
para Equipamiento Urbano; 15.1 por ciento para Vivienda, 6 por ciento para
Deuda Pública y 5 por ciento para Seguridad Pública Municipal.
Es decir, solo
le ha alcanzado para hacer algunos trabajos en comunidades como La Joya,
Mazatepec, Acajete, Mesa de la Yerba, Plan de Sedeño, Pata Mole, Pajarillos,
Barranquillas, Acocota, Rincón de la Joya y en Dos Veredas.
Sus 30 obras y
acciones consisten en la construcción de unas cuantas estufas ecológicas y
cocinas, de cuartos dormitorios y techos de concreto, rehabilitación de calles
y de alumbrado público, así como de comedores comunitarios. Unas cuantas calles
construidas y la reparación de vehículos para Seguridad Pública.
Lo más
destacable es que 1 millón de pesos, de los 18, se fue para adeudos, casi dos
millones de pesos para dos calles, un millón 600 mil pesos para la construcción
de cuartos dormitorio y techos y casi 700 mil pesos para la construcción de un
comedor comunitario.
Así, el lugar
donde amanece, como es su nombre en náhuatl, enclavado en la Sierra de
Chinconquiaco, poco puede hacer por sus mil 200 habitantes, pues entre la
carencia presupuestal, las deuda y el rezago, lo han sofocado.
@YamiriRodriguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario