Por Yamiri
Rodríguez Madrid
Hace apenas unos
días, comentábamos la alta incidencia de asaltos a trenes en Veracruz. El caso más reciente fue el sabotaje a uno en
Acultzingo, que cobró la vida del conductor.
Tras lo anterior, desde la Cámara de Diputados se ha hecho ya un
pronunciamiento para que nuestro estado establezca protocolos de seguridad para
prevenir y combatirlos.
Fue el diputado Ricardo
David García Portilla, quien expuso que el robo a ferrocarriles es una
problemática focalizada en Veracruz, Puebla, Guanajuato y Querétaro, que
concentran casi el 50 por ciento de la incidencia de este delito a nivel
nacional durante el año anterior.
De acuerdo con la
información oficial, en los primeros tres meses de 2017, tan solo en Veracruz se
contabilizaron 4 casos de robo a tren, mientras que, para el segundo trimestre,
se reportaron 105; en el tercero, 91, y en el cuarto 105, alcanzando un total
de 276 hurtos.
Dichos números
convierten al estado en el líder en el país en lo que hace a la incidencia
delictiva en esta materia.
Lo lamentable es
que el modus operandi para robar trenes es emplear a niños y personas de la
tercera edad para sabotear las vías del ferrocarril y provocar los
descarrilamientos. Además, los pobladores colocan y cuidan los obstáculos en
las vías, tales como piedras o barricadas, y participan en los saqueos para
llevarlo hurtado a camionetas ubicadas a las orillas de las vías y,
posteriormente, a distintas bodegas.
Otro método
denunciado por las propias empresas ferroviarias es aflojar y engrasar las vías
del tren. De ahí que ahora se señalara a
uno de los presidentes municipales de la región de ser cómplice de estos
hechos.
Si bien la
autoridad estatal ya se pronunció al respecto, es necesario pasar del dicho al
hecho a fin de que las inversiones no se pierdan en el estado, a consecuencia
de la inseguridad.
@YamiriRodríguez
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