Por Yamiri Rodríguez Madrid
La decisión de
Margarita Zavala de buscar la Presidencia de la República por la vía
independiente, reconfigura el tablero del ajedrez panista, rumbo al 2018, pues
muchos militantes de hueso azul, saldrán del partido después de décadas de
militancia.
A nivel
nacional, lo estamos viendo con la renuncia de José Luis Luege Tamargo y otros
más, así como con el apoyo público de cinco ex gobernadores que, amén de ser
expulsados, afirman trabajarán con ella para recabar firmas.
Otros
personajes, como el senador de Puebla, Javier Lozano, se han autoproclamado los
rebeldes del PAN, que están en contra de Ricardo Anaya, pero que no dejarán las
filas del albiazul.
Y es que si bien sus estatutos señalan
que no pueden apoyar a candidatos de otro “partido”, hay un vacío legal en lo
que hace a los independientes, por lo que muchos se refugiarán en dicha laguna.
Habrá que ver qué sucede en Veracruz,
pues Margarita tiene muchos incondicionales, como el ex diputado federal Miguel
Ángel Llera Bello y la ex diputada local, Cristina Pérez Silva, quienes estaban
trabajando en su proyecto.
Daniel Vázquez
García, ex diputado local de Poza Rica, se irá con ella, pues es Calderonista y
ha trabajado con la ex primera dama desde hace muchos años; junto con él se
irán muchos más.
Ya los veremos
en unos días más recabando firmas, pues Veracruz es uno de los cinco estados en
el país con el mayor padrón electoral, por lo que será una entidad clave para
juntar el millón de firmas que se requiere.
Pero además,
ex panistas, militantes de otros partidos, pudieran jalar también con ella,
como Víctor Alejandro Vázquez Cuevas, hoy en el Partido Encuentro Social (PES),
Alba Leonila Méndez en el Partido del Trabajo, o Jesús Vázquez, en el Partido
Verde Ecologista de México (PVEM).
Ante tal
panorama, ya comenzaron las patadas de ahogado: a través de sus redes sociales,
algunos de los integrantes del Comité Directivo Estatal (CDE), como José Manuel
Siu, afirmaron que la salida de Zavala es equiparable al caso de Juan Bueno
Torio, quien buscó la candidatura independiente a la gubernatura del
estado. Afirman que los votos que
obtuvo fueron mínimos, además de que alegan solo servirá para operar a favor
del PRI, lo que ofendió a varios panistas.
Al gobernador,
ahora panista, Miguel Ángel Yunes Linares, se le cuestionó sobre la salida de
Margarita Zavala, aunque ha aplicado la máxima de que calladito se ve más
bonito, pues no ha querido fijar una postura.
Sin embargo,
cabe recordar que cuando se dio el primer jaloneo en el PAN por la presidencia
nacional del partido, Yunes apoyó a Anaya y, ahora, parece está analizando bien
su jugada, sobre todo cuando la intención es que su hijo Miguel sea el
candidato a gobernador en 2018.
Así, sin duda,
la salida de Margarita Zavala viene a complicar la elección veracruzana pues,
aunque digan que no, sí habrá hemorragia azul y, electoralmente, será muy
costosa.
@YamiriRodríguez
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