Por Yamiri Rodríguez Madrid
El asesinato
de Mara Fernanda Castilla ha llenado en los últimos días, gran parte de los
espacios en los medios de comunicación. Pero poco se informó de que Claudia
Alondra Suarez Correa, fue asesinada a puñaladas en el Puerto de Veracruz, sin
castigo para su agresor.
Hace un año,
hablábamos de Tania Verónica Luna, la estudiante veracruzana de Sociología de
la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, a quien también le arrebataron la
vida. Hoy no hay ya más notas sobre ella.
Hace un año
también, los veracruzanos estábamos indignados por el crimen de Génesis
Deyanira Urrutia Ramírez pero, ¿qué ha sido de sus asesinos?
Hace apenas
tres meses, Lourdes Patricia Herrera Martínez, estudiante de Gestión
Empresarial de la Universidad Veracruzana (UV) fue una víctima más.
Como ellas,
lamentablemente, hay cientos más que han
A diario en
las redes sociales, circulan fotos de jovencitas a quienes sus padres y amigos
buscan con desesperación: Veracruz es un estado feminicida.
Mientras el
fiscal veracruzano, Jorge Winckler Ortiz, el fin de semana se exhibía en sus
redes preparando paella, miles de personas marchaban en las calles para exigir
justicia por este nuevo caso y una mujer, propietaria de un restaurante en
Orizaba, fue levantada y posteriormente ejecutada.
No solo es
insensibilidad e ineficiencia de las autoridades encargadas de procurar
justicia, es también una barbarie la que estamos viviendo pues no solo son
mujeres a las que matan, son a nuestros jóvenes en general.
No podemos
acostumbrarnos a vivir entre secuestros y asesinatos, mucho menos en la
impunidad. Ayer fueron ellas pero, desafortunadamente, esto no termina. La sociedad civil se organiza; las mujeres
entre nosotras ideamos formas para protegernos pero, ¿y la autoridad cuándo
entregará resultados? ¿Cuándo detendrá a los asesinos? ¿Cuándo dará justicia a
miles de familias enlutadas? Paz y consuelo jamás, pero por lo menos castigo.
@YamiriRodríguez
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