Por Yamiri Rodríguez Madrid
Como sucede en la mayoría de los
municipios veracruzanos, la contienda por la Presidencia Municipal en Alvarado
está centrada entre dos actores políticos. No son las marcas, sino los nombres,
trayectorias y prestigios, los que se enfrentan: Alejandro Caballero Azamar y
Tavo Ruiz Barroso.
Caballero Azamar, abanderado del
Movimiento Ciudadano, es un candidato preparado académicamente, formado en el
extranjero, y con experiencia, pues siendo muy joven, se desempeñó como Síndico
de su tierra natal. Proviene de una
familia bien vista y apreciada, por lo que tiene genuino respaldo social.
Octavio Ruiz ya fue presidente municipal
de Alvarado en dos ocasiones; la primera como suplente de Sara Luz Herrera
Cano, presa en el penal de Pacho Viejo por homicidio desde hace ya varios años.
Hoy llega cobijado por el PRI-PAN y PRD, pero pese a la fuerza de tres
membretes, viene arrastrando muchos negativos, como esa necedad de imponer a su
esposa en cualquier cargo de elección popular que se atraviese y esté vacante.
El repudio social a esa acción se ha manifestado en los resultados en las urnas
y, todo parece indicar, que otra vez los alvaradeños le pasarán la factura.
El actual munícipe, Bogar Ruiz Rosas,
incluso lo tiene denunciado por un presunto desvío cercano a los 500 millones
de pesos. El presupuesto de Alvarado, en este 2021 es de poco más de 305
millones de pesos.
Del resto de los contendientes poco se ve
o se sabe, lo cierto es que la importancia de este ayuntamiento radica en su fuerza
inmobiliaria; lo que antes era una potencia nacional camaronera hoy, Antón
Lizardo, es una de las zonas de mayor plusvalía en todo el país y se sigue
desarrollando de manera exclusiva, aunque el resto del territorio municipal sea
contrastante. Ya veremos de qué cuero salen más correas.
@YamiriRodriguez
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