Yamiri Rodríguez Madrid
Aún en el arranque de los municipios
veracruzanos y en la víspera de que les lleguen finalmente los recursos, un
rubro en el que bien harían en sumar los ayuntamientos es el de la
educación. Hace unos días, el
secretario Zenyazen Escobar García puntualizaba la necesidad que existe de
dotar a las escuelas de los servicios básicos y de ayudar en la recuperación de
los inmuebles afectados por los robos durante la pandemia del Covid19.
Es cierto que Espacios Educativos tiene un
alto presupuesto para atender todos los planteles, pero también hay temas que
parecieran tan sencillos y que no se resuelven, como que las luminarias en la
periferia de las escuelas funcionen. Las
y los estudiantes de los turnos vespertinos estarían más seguro si se cambiaran
todos los focos fundidos, si las paradas de autobuses estuvieran en buenas
condiciones y eso es competencia de los ayuntamientos.
Ni que decir del tema del agua; no hay nada
más insalubre que tener cientos de niños y jóvenes en una institución sin agua
en los baños, lo que es tristemente una realidad en muchos planteles. Si no hay el vital líquido para bajarle a la
taza del baño, tampoco lo hay para que los estudiantes acaten las medidas sanitarias
de lavarse las manos constantemente.
No pasemos por alto los datos contenidos
en el Sistema de Consulta de Obras y Acciones Municipales del Órgano de
Fiscalización Superior (ORFIS), los cuales revelan que los 212 ayuntamientos
veracruzanos solo destinan 3.85 por ciento de su presupuesto para el
rubro de la Educación y 0.71 por ciento para Estímulos a la Educación.
En un estado tan grande y tan complejo como el nuestro
y a punto de que en el mes de mayo todos regresen a las aulas, bien harían las
autoridades municipales en sumar esfuerzos en pro de la educación, sobre todo
cuando son ellos quienes tienen la radiografía completa de cómo está dicho
rubro en sus territorios. Solo así se
puede abatir el rezago de una manera mucho más rápida.
@YamiriRodriguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario