Por Yamiri Rodríguez Madrid
Justo la semana pasada se dio finalmente el cambio en la dirigencia estatal de los cuadros juveniles del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Aunque Aldo Lara ya está despachando desde enero como regidor en Poza Rica, hoy apenas inicia la revisión de las cuentas que debió haber entregado a la juventud del tricolor.
Y es que por citarle un ejemplo, cuando en él recaía la responsabilidad de reclutar a 45 mil jóvenes en todo el estado a las filas del partido, no alcanzó ni la ridícula cifra de 150.
Empero, cada proceso electoral vemos salir a los jóvenes, de todos los partidos políticos, exigiendo espacios para este sector poblacional, demandando oportunidades en candidaturas, en regidurías. Las pocas posiciones que consiguen son desaprovechadas o mal utilizadas, dejando mal parado a un buen número de muchachas y muchachos que tienen el deseo de ser partícipes activamente en la política.
Otros han encontrado el modo de supervivencia en estos cupos partidistas y ahí se han enquistado y hasta perdido el cabello, como pasó hace ya algunos años con Ariel Patricio Gómez Anell en el Instituto de la Juventud Veracruzana (Injuver), o con Cuitláhuac García Jiménez, como “joven” perredista.
Hay quienes se cubren con la bandera de ser alcaldes jóvenes –aunque realmente este periodo de la vida a quienes muchos consideran el divino tesoro es sólo hasta los 29 años- teniendo actitudes viejas y acartonadas como el propio presidente municipal de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez y la gran mayoría de su equipo de trabajo. Lejos de estimular a la juventud con su ejemplo, son parte los baby dinos.
Los recién llegados Sandro Gómez Valdés y Damara Gómez Morales, como Presidente y Secretaria General de la Red de Jóvenes Moviendo a México en Veracruz, tienen un gran reto a cuestas, esperando que sus personalidades tan contrastantes entre sí, puedan involucrar a esos 45 mil jóvenes a las filas partidistas, pues esta reestructuración de cuadros es por un periodo de 4 años.
Él es oriundo de Emiliano Zapata, abogado de profesión, emanado de las filas estudiantes de la semillera política Facultad de Derecho.
Ella es originaria de Minatitlán, hija de la actual regidora del PRD, Juana Isabel Morales Aguirre, mejor conocida como La Potra. A sus 27 años, tiene dos licenciaturas, una en Ciencias de la Comunicación y la otra en Derecho y está estudiando la maestría en Administración Pública.
Si bien de todos es sabido que Damara no era del equipo de Gómez Váldez y que entró en el último minuto de la convocatoria, lo cierto es que el trabajo que hiciera en el sur le valió la posición que hoy ocupa, más allá de las tragedias familiares y la nueva filiación partidista de su mamá. No usa zapatillas pues dice que hay que caminar y ensuciarse los zapatos, que hay que ir a buscar a los chavos a las colonias, que hay que ponerse a estudiar y a trabajar para no hacer el ridículo como representantes.
Bien decía el escritor español Francisco Quevedo: lo que en la juventud se aprende toda la vida dura, Ya hablarán los resultados, la frialdad de los números de cara al proceso electoral…
@YamiriRodriguez
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