Por Yamiri Rodríguez Madrid
En días pasados el Senado de
la República aprobó una reforma al artículo 5º de la Ley de Seguridad Nacional,
mediante la cual se incluyen a ésta los fenómenos naturales perturbadores y pandemias
que afecten el desarrollo. Y es que hay en todo el país, un total de 617
municipios que están identificados con alto y muy alto índice global de
riesgos; de estos, una buena parte se ubican en el Estado de Veracruz.
Los 617 municipios están ubicados en 23 estados del país,
lo que equivale, según la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y
Urbano (Sedatu), a más de 90 millones de habitantes en el país residiendo en
zonas de riesgo, de los cuales cerca del 70% habitan en zonas urbanas, el 9.5%
en zonas semiurbanas y el resto, 20.5%, en zonas rurales. El tema no es nuevo para nosotros, cuando año
con año sufrimos los embates de la naturaleza y 8 mil comunidades, a lo largo y
ancho del territorio, se encuentran en esta categoría.
La Secretaría de Protección Civil Estatal ha trabajado
arduamente, desde años atrás, en la elaboración del Atlas de Riesgo (http://www.atlasriesgosver.gob.mx/mapper), en el cual se clasifican por zonas sísmicas,
volcánicas, hundimiento, huracanes, heladas, granizadas, inundaciones, niebla,
temperaturas máximas, mínimas y hasta tipo de instalaciones y almacenamiento de
sustancias, un trabajo detallado que en otros estados no se tiene.
Hoy, que los fenómenos naturales son ya un tema de
seguridad nacional, por poner en peligro la estabilidad y gobernabilidad del
Estado y la seguridad de la población, Veracruz lleva ya un avance importante,
aunque el reto ahora consiste en poder reubicar a miles de personas que hoy aún
habitan en zonas de peligro, un trompo que prácticamente ninguna autoridad
municipal se quiere echar a la uña.
@YamiriRodríguez
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