martes, 29 de julio de 2008

Reportaje: Habemus santum!


Ciudad del Vaticano/ Enviada

Las espera de veinte años para la feligresia xalapeña termino este domingo 15 de octubre cuando el Papa Benedicto XVI canonizo a Monsenor Rafael Guizar y Valencia en la santa sede del Vaticano.
En la Plaza Lerdo el pueblo aguardaba el momento sobrellevando el frio con atoles y tamales brindados por el Gobierno del Estado. En la Plaza de San Pedro la delegacion mexicana-, conformada en su gran mayoria por veracruzanos y michoacanos-, elevaba las gracias, las plegarias, al nuevo santo mexicano.
Si bien el imperio romano conquisto antaño una importante porcion de su mundo conocido, hace unos dias el imperio azteca conquisto el corazon del pais de la bota con su devocion.

Vida de Santo.
San Rafael Guizar nacio en 1878 en Cotica, Michoacan, en el seno de una familia profundamente catolica. Pese a que sus padres y sus siete hermanos gozaban de una desahogada posicion economica, nuestro santo conocio el sufrimiento a una muy corta edad, pues a los nueve anos perdio a su madre. La ausencia de doña Natividad Valencia de Guizar hizo que años mas tarde se convirtiera en el padre de los huerfanos espirituales.
Apenas a sus doce años comenzo a estudiar con los padres jesuitas alla en su natal Cotija y a descubrir en el ese espiritu de caridad que hoy lo llevo a los cielos. Al culimar sus estudios en el Seminario Mayor, pronto fue nombrado misionero apostólico por su Santidad León XIII.
Para 1913 el primer jerarca catolico en Latinoamerica en ser canonizado se trasladaba cotidianamente a los estados de Puebla, Morelos y el DF a evangelizar entre las tropas de los soldados.
Eran tiempos dificiles en el pais pero sobre todo para la iglesia catolica pues se desato la llamada Guerra Cristera. Guizar y Valencia no salio exento de esta al ser desterrado a los Estados Unidos, Cuba y Guatemala, donde su trabajo de predicar la palabra de Dios no ceso.
Pese a los hechos salio bien librado y los planes divinos continuaban para el: en agosto de 1919 fue elegido Obispo de Veracruz por el entonces Papa, Benedicto XV ; tres meses despues, en la Habana, Cuba, recibio la consagracion episcopal.
Recien llego a la diocesis de Xalapa se arremango la sotana y se puso a trabajar: ayudo, tanto material como espiritualmente, a los damnificados por el gran terremoto de 1920, reconstruyo el seminario, entre muchas otras labores que dejaron huella de su calidad humana.
Expulsado del pais por el presidente Plutarco Elias Calles, San Rafael Guizar tuvo que refugiarse de nueva cuenta en Estados Unidos y en Cuba asi como en Guatemala y Colombia; regreso por un breve tiempo a su amada Xalapa pues el gobernador Adalberto Tejeda ordeno su destierro del estado de Veacruz al oponerse a convertir la Diocesis en un departamento de la administracion estatal.
Pero ni gobiernos ni enfermedades detuvieron su mision en la vida:El 6 de junio de 1938 San Rafael Guizar y Valencia dejo el mundo terrenal aunque no por ello dejo de dar un halo de esperanza entre la feligrecia. El 28 de mayo de 1950, cuando se exhumaba su cadaver se encontro que este estaba incorrumpo.
En enero de 1995 Su Santidad Juan Pablo II lo beatifico y este 15 de octubre el Papa Benedicto XVI lo nombro santo. Hoy el trabajo para el se ha acumulado pues miles de personas creen que mediante su intercesion sus plegarias seran escuchadas en los cielos.


La ceremonia
Llegaron en numerosos camiones hacia la Plaza de San Pedro, en el corazon romano: eran los peregrinos mexicanos que esperaron cerca de 20 años para que el Obispo de Xalapa, monseñor Rafael Guizar y Valencia fuera declarado santo por la maxima autoridad eclesiastica.
En sus manos sobresalian los pases amarillos de entrada emitidos por la Prefettura Della Casa Pontificia. En la Capilla Papal su santidad Benedicto XVI lo canonizaria en punto de las 10 horas –tiempo de Roma-, junto con Filippo Smaldone (Italia), Rosa Venerini (Italia) y Theodore Guerin (Francia), fundadores respectivamente de la Congregacion de la Orden Salesiana, de las Maestrias Pias Venerinas y de la Providencia de Santa Maria.
Los rios de gente ataviadas con la imagen del santo en el pecho y la bandera tricolor en la mano, comenzaron a invadir la Via della Conciliazione para ocupar un buen puesto entre las mas de 50 mil almas que la mañana de ese domingo se dieron cita para presenciar el evento.
Unos venian desde el mismisimo Cotija, Michoacan, otros llegaron apoyados en baston, en el brazo de una nieta, sobrina o de una alma caritativa que les hiciera el favor de guiarlos por las empedradas calles romanas.
En unos cuantos minutos, bajo la mirada fija de los doce apostoles, los peregrinos habian llenado la plaza. Unos oraban en silencio, otros hacieron grupos para rezar el rosario por segunda o tercera ocasion por la mañana, otros mas se tomaban fotos aprovechando la cercania de los caraviniellis.
La clase politica, religiosa y social mexicana y veracruzana comenzo a llegar : el diputado local veracruzano, Alejandro Montano Guzman, le siguio el gobernador del Estado de Mexico, Enrique Peña Nieto, quien acompaño a su esposa por ser familiar en segundo grado del santo; el canciller mexicano Luis Ernesto Derbez, el embajador de Mexico en la Santa sede, Luis Felipe Bravo Mena asi como los cardenales Norberto Rivera Carrera y Juan Sandoval Iñiguez.
Uno a uno fueron tomando sus puestos en la explanada principal los 38 jerarcas catolicos entre ellos Monseñor Sergio Obeso Rivera, Arzosbispo de Xalapa, Lorenzo Cardenas Areguillin, Obispo de Papantla, Guillermo Ranzahuer Gonzalez, Obispo Emerito de San Andres Tuxtla, Hipolito Reyes Larios, Obispo de Orizaba, Eduardo Porfirio Patiño Leal, obispo de Cordoba, Luis Felipe Gallardo Martin del Campo, Obispo de Veracruz, Domingo Diaz Martinez, Obispo de Tuxpan, Rutilo Muñoz Zamora, Obispo de Coatzacoalcos y Jose Trinidad Zapata, Obispo de San Andres Tuxtla.
Comenzo la ceremonia liturgica al arribar el papa Benedicto XVI ataviado para la ocasion. La primera lectura del Santo Evangelio corrio a cargo del coatepecano Ernesto Perez Astorga y posterior a esto el padre Rafael Gonzalez se arrodillo ante el sucesor de Pedro, junto con otros cuatro sacerdotes, representando al Colegio Pontificio Mexicano.
Minutos despues el Santo Padre pronunciaba en latin la solemne Formula de Canonizacion, siendo el primero en serlo declarado oficialmente nuestro santo mexicano.
“Ad honorem Sanctae et Individuae Trinitatis, ad exaltationem fidei catholicae et vitae christianae, auctoritate Domini nostri Iesu Christi, beatorum Apostolorum Petri et Pauli…”.
Fueron dos horas y media del rito catolico. Los hijos del gobernador Fidel Herrera, Javier y Rosita Herrera Borunda, pasaron ante el Santo Papa para dejarle unos obsequios, entre estos el libro Angel sin Ojos, de 1950, escrito por Carlos Loret de Mola y prologado por Jose Vasconcelos.
Al final la bendicion para el pueblo de Mexico, un viva solitario, perdido entre la multitud para el maximo jerarca catolico, lagrimas de alegria, pleglarias entrecortadas y las rodillas de miles de veracruzanos que por primera vez se hincaban ante el nuevo santo: Monseñor Rafael Guizar y Valencia.

No hay comentarios: